Gobierno cubano evalúa marcha de la Tarea Vida y la preservación de la memoria histórica

El Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático, denominado como Tarea Vida, y el programa para detener el deterioro del patrimonio documental de Cuba, continúan en la agenda del Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, quien examinó ambos temas como parte de un sistema de trabajo en el que se chequean de manera habitual más de una veintena de programas de impacto en el desarrollo del país.
En esta ocasión, correspondió al Ministerio del Interior informar sobre las acciones que desarrollan para asegurar que se implemente la Tarea Vida. El coronel Manuel Lama Gómez, jefe del Cuerpo de Guardabosques de Cuba, explicó que estas están relacionadas, sobre todo, con no permitir ilegalidades en el ordenamiento territorial de los asentamientos costeros amenazados por la elevación del nivel del mar; la protección de manglares y ecosistemas marinos; así como el fortalecimiento del sistema de alerta temprana ante incendios en los bosques.
Se refirió al uso en las instalaciones de sistemas fotovoltaicos para aprovechar el potencial de radiación solar y a la introducción por parte del Grupo Empresarial Agrícola del Minint de variedades agrícolas y especies marinas y dulce acuícolas, resistentes a las altas temperaturas, la sequía y las plagas.
Mencionó la aprobación por el Consejo de Ministros, en junio de 2018, de la Estrategia y Programa Nacional de Gestión y Manejo del Fuego en los Bosques para el período 2018-2025. Se avizora, dijo, que los incendios forestales aumenten en intensidad y propagación a consecuencia del cambio climático, de ahí que contar con una herramienta para gestionar este grave problema sea una fortaleza de nuestro país.
En la reunión también se dio a conocer el trabajo que se realiza en la provincia de Camagüey para cumplir con la Tarea Vida, donde se han identificado varias zonas priorizadas: los cayos turísticos y la costa norte; los asentamientos costeros que se pronostica que desaparezcan entre el 2050 y el 2100; las playas arenosas con erosión intensa; y las zonas costeras desprotegidas con intrusión salina al sur de la provincia.
Según precisó Andrea Armas Rodríguez, delegada del Citma en ese territorio, los principales resultados de 2018 se concentran en la eliminación de especies exóticas invasoras, la recuperación de la vegetación en las dunas, la construcción de adecuados accesos hacia las playas y la sustitución de tecnologías para disminuir la emisión de gases de efecto invernadero. De manera particular, mencionó la rehabilitación de las plantas potabilizadoras de Nuevitas, que han beneficiado a más de 43 mil camagüeyanos.
De la reubicación de asentamientos costeros que están en zonas vulnerables, informó que deben trasladarse 1 254 viviendas, al cierre de 2018 ya habían sido reubicadas 54 y fueron identificados todos los lugares donde se construirán las nuevas comunidades.
Sobre este asunto, el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros valoró que es esta una de las tareas más complejas, por lo cual, cumpliendo con la Política de la Vivienda aprobada en el país, se debe planificar cada año la cantidad de viviendas a reubicar. Además, tenemos que velar por que los lugares que se deshabiten no vuelvan a ser ocupados.
Díaz-Canel destacó el trabajo de Camagüey —la provincia más extensa del país— que cuenta actualmente con importantes inversiones en el turismo, la industria y la agricultura. Citó, por ejemplo, la que se realiza allí para la modernización de radares con tecnología doppler que, junto a una mayor precisión en las observaciones meteorológicas, permitirá ahorrar recursos financieros a partir de sustituir importaciones.